La promulgación de la ley que formaliza la zona como protegida, forma parte del Plan Nacional de Protección de humedales 2018 -2022, cuyo objetivo central es proteger la biodiversidad y los servicios ecosistémicos en áreas prioritarias. Ayer fue publicado en el Diario Oficial y una experta valoró el hito consignando que «es un avance hacia la conservación de estos ecosistemas tan valiosos y extraordinarios de la zona costera del desierto». Fuente: El Diario de Atacama, 17 de mayo de 2022.
Mediante la publicación del Decreto Nº12 en el Diario Oficial, el Ministerio de Medio Ambiente declaró oficialmente como Santuario de la Naturaleza el humedal Desembocadura Río Copiapó, en la región de Atacama. Dicho sitio se encuentra ubicado en la Región de Atacama, Provincia de Copiapó´, comuna de Caldera y posee una superficie aproximada de 115,2 hectáreas.
Recibe su principal aporte de agua del río Copiapó, el cual cumple un rol fundamental en el tamaño y condición del humedal. La zona litoral de playa Las Salinas donde desemboca el río Copiapó, presenta elementos geomorfológicos y bióticos que incluyen una barrera arenosa que genera un humedal costero asociado.
De acuerdo a información proporcionada por el Consejo de Monumentos Nacionales, son Santuario de la Naturaleza «todos aquellos sitios terrestres o marinos que ofrezcan posibilidades especiales para estudios e investigaciones geológicas, paleontológicas, zoológicas, botánicas o de ecología, o que posean formaciones naturales, cuya conservación sea de interés para la ciencia o para el Estado».
Medio ambiente
En esa línea el seremi (S) del Medio Ambiente, Carlos Olivares afirmó que «el humedal de la desembocadura del Río Copiapó junto a las lagunas y salinas costeras corresponde a un sistema único en una matriz desértica. En el área propuesta existen dos tipos de cuerpos de aguas: los cauces con aguas circulantes que corresponde principalmente al río Copiapó y las lagunas costeras, ubicados al norte de la desembocadura».
Esta designación de esta zona bajo esta categoría, se enmarca en el Plan Nacional de Protección de humedales 2018 -2022, cuyo objetivo central es proteger la biodiversidad y los servicios ecosistémicos en áreas prioritarias de humedales, a través de la declaración de una categoría de área protegida que garantice su conservación y gestión a largo plazo. Con esta declaración, los tres humedales existentes en la región quedan protegidos bajo el amparo del Estado.
Información aportada por la Seremi de Medio Ambiente de la Región de Atacama, señala que la avifauna de la zona registra cerca de 119 especies de aves, de las cuales dos son endémicas: churrete costero (Cinclodes nigrofumosus) y canastero chileno (Pseudasthenes humicola) y 19 especies se encuentran clasificadas por el Reglamento de Clasificación de Especies (RCE).
Asimismo, el humedal de la desembocadura del río Copiapó es un importante hábitat de aves migratorias, con aproximadamente 20 especies que provienen del humedal río Loa y para un conjunto de aves acuáticas, varias de las cuales encuentran en este sitio el límite norte para su distribución en el país, como el cisne coscoroba (Coscoroba coscoroba), el siete colores (Tachuris rubrigastra), el perrito (Himantopus mexicanus), el trile (Agelasticus thilius) y el colegial austral (Lessonia rufa).
En cuanto a la composición florística, según los estudios de línea base y monitoreo realizados en la desembocadura del río Copiapó, en el área propuesta se han identificado 54 especies nativas, de las cuales 16 son especies endémicas. Además, destaca la presencia de siete reptiles, todos endémicos, como el corredor de Atacama y la lagartija de Atacama, junto con la existencia de mamíferos nativos como la yaca y el guanaco.
Asimismo se debe señalar que la figura de Santuario de la Naturaleza (SN) está reconocida en nuestro país como un área protegida oficial. El Santuario de la Naturaleza del humedal de la desembocadura del Río Copiapó será administrado por la Ilustre Municipalidad de Caldera, con apoyo de la Seremi del Medio Ambiente en su rol de supervigilancia y custodia de este tipo de áreas.
Con este importante paso, la región cuenta con protección oficial de tres de los cuatro principales humedales costeros de la Región de Atacama: SN Desembocadura del Río Copiapó (DS. N° 12/2022 MMA), SN humedal costero de Totoral (DS. N° 13/2021 MMA) y el SN humedal costero de Carrizal Bajo (DS. N° 39/2019 MMA). El próximo desafío es lograr la declaratoria de Santuario de la Naturaleza del humedal de la desembocadura del Río Huasco y avanzar en la generación de los Planes de Manejo de estas nuevas áreas protegidas.
Voz experta
La Dra. Tatiana Izquierdo, Licenciada en Ciencias Ambientales y doctora en Ciencia y Tecnología Ambiental y quien fuera investigadora de la Universidad de Atacama y actualmente investigadora externa de la Corporación para la Investigación y Avance de la Paleontología e Historia Natural de Atacama CIAHN-Atacama.
Hace un año, la prestigiosa revista científica Journal of Marine Science and Engineering (Revista de Ingeniería y Ciencias Marinas o JMSE por sus siglas en inglés) consideró la publicación de una investigación realizada por Manuel Abad y Tatiana Izquierdo, ambos investigadores y docentes de la UDA, además de Estefanía Bonnail y Nuria Navarro prestigiosas doctoras e investigadoras medioambientales.
La publicación denominada «Los áridos humedales costeros del norte de Chile: hacia una gestión integrada de sistemas altamente amenazados» trata sobre las amenazas y formas de protección de estos ecosistemas.
Ante el anuncio de ayer, de oficializar la declaración de la zona como Santuario de la naturaleza, le consultamos su visión a la Dra. Izquierdo, quien expresó que «se trata de una muy buena noticia, la margen norte del humedal ya formaba parte del Área Marina Costera de Múltiples Usos Isla Grande de Atacama, pero la sur no estaba protegida con ninguna figura legal. Es un avance hacia la conservación de estos ecosistemas tan valiosos y extraordinarios de la zona costera del desierto».
Izquierdo agregó que «el año pasado publicamos un artículo en el que identificábamos las principales amenazas de los humedales costeros del norte de Chile y todo lo que ayude a reducir esas amenazas (vehículos fuera de los caminos, perros que atacan a la fauna, turismo descontrolado, etc.) es positivo».
«Pero es importante considerar que los humedales costeros en el norte de Chile sobreviven con muy poco aporte de agua en la mayor parte de los casos proveniente de los acuíferos (napas) cada vez más sobreexplotados, por lo que sería muy interesante que estas figuras considerasen proteger de alguna de la extracción de agua subterránea las cuencas y los acuíferos que los alimentan para poder asegurar su supervivencia en el tiempo» finalizó la académica.