Marcos Morales calificó como «una falta de respeto» que decisión no haya sido dialogada con autoridades comunales: «Nos sentimos ignorados». Fuente: La Estrella de Valparaíso, 20 de junio de 2022.
Diversas reacciones ha despertado la decisión del directorio de Codelco del pasado viernes, en la cual se aprobó -por mayoría- el cese gradual de operaciones de la planta de fundición Ventanas, en un plazo de cinco años.
La determinación -que cuenta con respaldo presidencial- se tomó a raíz de los diversos episodios de contaminación que han afectado a Quintero y Puchuncaví en los últimos años; solo en las recientes dos semanas, hubo cinco episodios que dejaron un saldo de más de 300 afectados.
Si bien el cierre ha sido calificado como «un avance» por la ministra de Medio Ambiente, Maisa Rojas, y ONGs como Greenpeace, desde la comunidad de Quintero y Puchuncaví caen cuestionamientos, pues sostienen que la solución no es el cierre total de la planta, sino una mayor inversión por parte de la estatal, lo que permitiría aumentar el nivel de captación de gases contaminantes y, de este modo, reducir las emanaciones nocivas hacia las comunidades aledañas.
SE SIENTEN IGNORADOS
Tras la confirmación del cese gradual de la fundición Ventanas, el alcalde de Puchuncaví, Marcos Morales, manifestó su molestia por no ser involucrados como comunidad en la toma de decisiones.
«Yo me enteré por la prensa. A 48 horas de que se haya aprobado el cierre de la planta, es una falta de respeto que no se hayan contactado con nosotros como municipalidad. Nos sentimos ignorados», expresó en conversación con La Estrella.
Asimismo, el edil calificó la determinación como «sumamente apresurada», cuestionando, además, el alto costo que tendría cierre de la planta, el que se estima en unos $500 millones de dólares, muy por encima de los US$56 millones presupuestados para elevar la captación de gases contaminantes de la planta de Ventanas de un 95% a un 99%.
«Esto nos hace entender que algo más se esconde detrás de esta decisión», señaló Marcos Morales.
«SOLUCIÓN ES INVERTIR»
El alcalde de Quintero, Mauricio Carrasco, reconoció la crisis ambiental, sin embargo, también manifestó su preocupación por los trabajadores.
«Al tema ambiental que es lo principal, la salud de los niños y adultos mayores, me preocupa que se sume un tema social y económico. Acá no son solo 300 trabajadores de planta, hay también 420 trabajadores contratistas que también son afectados y son los que más nos preocupan», subrayó Carrasco.
«No soy abogado de Codelco, pero me preocupa el futuro laboral (de los trabajadores). La fundición lleva una semana detenida y hemos tenido tres o cuatro episodios. Eso demuestra que la sumatoria de estas empresas es lo que está provocando lo que vivimos hoy en día», agregó.
Finalmente, el edil de Quintero señaló que «la solución era la inversión. Invertir en tecnologías para la planta, que no daba más refinando como lo estaba haciendo», indicó.
Durante la jornada de ayer, autoridades respaldaron la decisión del directorio de Codelco.
Maisa Rojas, ministra de Medio Ambiente, explicó que «el evento del 6 de junio es bastante gatillante para que la decisión se tome hoy y no en uno o dos meses más. Aquí hay contaminación por material particulado, contaminación por compuestos orgánicos volátiles, o contaminación por dióxido de azufre. En este último caso, la fundición es responsable de casi el 62% del azufre».
Cabe destacar que el eventual cierre de Fundición Ventanas estará sujeto a una modificación de la Ley 19.993, la cual obliga a la estatal a fundir los minerales de Enami exclusivamente en la operación de Ventanas. Por esta razón, el futuro de la planta de Puchuncaví ahora se encuentra en manos del Congreso.